Sin duda, el año 2020 tiene como foco principal maximizar todos los protocolos de desinfección, ya sea en establecimientos públicos, sanitarios o comercios. El objetivo es ofrecer la máxima descontaminación en cuanto a virus y otros microorganismos que puedan resultar dañinas para los ciudadanos.
Los métodos de desinfección tradicionales puede que hayan quedado limitados y no logren resultados totalmente eficaces para las necesidades actuales.
Hasta el momento, diversos estudios demostraron que más del 45% de los pacientes que contraen infecciones en centros sanitarios era en el momento del ingreso, tras la contaminación cruzada en superficies, especialmente superficies de contacto directo como sillas de rueda, pomos, mesas, entre otros.
Con la tecnología tecnostática se permite certificar una bioseguridad y desinfección óptimas, a través de una fórmula innovadora patentada, capaz de cubrir íntegramente las superficies y objetos a desinfectar.
Los nuevos equipos de pulverización electrostática están creados exclusivamente por Tecnostatic y resuelven en una proporción más elevada que otros métodos de desinfección tradicionales la capacidad de desinfección integral en superficies, ofreciendo mayor rapidez, ahorro en productos/mano de obra y tiempos de ejecución, siendo más eficiente, cómodo y rentable.
Estos equipos de pulverización son fáciles de transportar, por lo que son una solución ideal para centros sanitarios, escuelas y demás lugares concurridos.
El pulverizador electrostático TS 100 está diseñado para desempeñar funciones de desinfección integral en grandes instalaciones donde es necesario un trabajo continuado, mientras que el pulverizador electrostático TS 200 es un equipo creado para instalaciones de diferentes tamaños y sobre todo, para combinar distintos trabajos en un mismo día, gracias a la rapidez y eficacia de la fórmula.
Tecnostatic se consolida en europa como el primer fabricante europeo de equipos de la desinfeccion del presente y futuro, es decir, de la tecnologia electrostatica, que ya está presente en instalaciones como hospitales, universidades, parques de bomberos, industria alimentaria, empresas de transporte y en empresas como ferrovial, la ume (unidad militar de emergencias) y otros más.